La Cancillería de Palestina condenó este martes la continua agresión de las fuerzas de Israel contra la población que reside en territorios ocupados, y repudió la masacre registrada en la Nablus.

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“El Ministerio de Relaciones Exteriores de Palestina considera que estos crímenes e incursiones sangrientas son una implementación de una política oficial del Gobierno israelí destinada a imponer a nuestro pueblo la coexistencia con la ocupación”, expresó en un comunicado.

Asimismo, afirmó que esto forma parte de los esquemas colonialistas de las autoridades de Israel, siendo más expansionistas para la construcción de los asentamientos, "robando la tierra palestina".

“El Ministerio responsabiliza total y directamente al Gobierno israelí por estos crímenes atroces. También responsabiliza a la comunidad internacional por no implementar las resoluciones de legitimidad internacional y presionar a la potencia ocupante para que detenga su agresión de inmediato”, acotó el ente.

La Cancillería aseguró que hará un seguimiento de estos crímenes para que sean llevados ante la Corte Penal Internacional (CPI), y exigirá que se terminen las investigaciones de este ente para juzgar lo antes posible los crímenes israelíes contra el pueblo palestino.

“El Ministerio afirma que nuestro pueblo está decidido a deshacerse de la ocupación y no seguirá siendo víctima de su continuación y víctima del doble rasero internacional”, concluye el comunicado.

Esto ocurre luego de la masacre ocurrida en la ciudad de Nablus, cuando fuerzas israelíes asesinaron a cinco palestinos e hirieron a decenas tras de abrir fuego con balas reales contra ellos.