El Gobierno de México iniciará la distribución de los fondos de emergencia, ascendentes a 60.000 millones de pesos mexicanos (aproximadamente 2.600 millones de dólares), tarea que correrá a cargo de la Secretaría de Hacienda.

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Según se informó en la conferencia de prensa diaria del presidente Andrés Manuel López Obrador, los emolumentos se destinarán al pago de la deuda pública. Sin embargo, los estados deberán presentar un plan de austeridad en el manejo de estos recursos.

Por su parte, el coordinador nacional de Protección Civil, David León, defendió la transparencia con que se adelantará este proceso. “El instrumento no es corrupto. El que puede hacer mal uso es el funcionario”, dijo.

En el encuentro, el mandatario insistió en evitar a toda costa la deuda pública. “A diferencia de las deudas personales que no se heredan a los hijos, la pública sí, por generaciones”, razonó.

“Hay que ser muy responsables, no endeudar al país (…) apretarnos el cinturón para no aumentar la deuda”, insistió el mandatario.

Varios estados mexicanos han incrementados sus deudas públicas durante el enfrentamiento a la pandemia, como es el caso de Jalisco, con 6.000 millones de pesos mexicanos.

México reportó, este miércoles, un total de 74,560 pacientes confirmados al nuevo coronavirus, de los cuales han fallecido 8,134.