Manifestantes de Burkina Faso protestaron este sábado ante la embajada de Francia en ese país africano y un grupo de ellos prendió fuego a la sede diplomática en rechazo a una posible relación del Ejército francés y los militares burkinabeses opuestos al golpe de Estado perpetrado la víspera.

LEA TAMBIÉN:

Países africanos exigen mayor ayuda global ante Naciones Unidas

De acuerdo con medios de prensa, varios manifestantes prendieron fuego a los muros externos de la misión en Uagadugú (capital), tras lo cual la embajada de Francia expresó que el país europeo y sus fuerzas armadas no están implicadas en el golpe.

A través de un comunicado, la representación francesa expresó que “está siguiendo de cerca la situación política que prevalece actualmente en el país y en particular en Uagadugú”.

De igual manera, el texto desmiente “firmemente cualquier implicación del Ejército francés en los hechos de las últimas horas, así como los rumores según los cuales las autoridades de Burkina Faso han sido acogidas o están bajo la protección de los soldados franceses”.

Por su parte, el jefe del Estado Mayor del Ejército de Burkina Faso, coronel David Kabre, pidió una solución negociada a la situación del país tras el golpe de estado este viernes, cuando militares encabezados por el capitán Ibrahim Traoré depusieron al teniente coronel Paul- Henri Sandaogo Damiba, quien lideraba la junta militar al frente del país.

Kabre señaló que hay dos grupos con opiniones contrapuestas dentro del Ejército local y que “esta tensión no representa la posición de nuestra institución, que es parte de una dinámica de cohesión y movilización de todas las fuerzas”.

Las fuerzas que dieron el golpe de Estado anunciaron la suspensión de la Constitución y de la carta de transición, decretaron la disolución del Gobierno y establecieron un toque de queda de las 21H00 de este viernes a las 05H00 hora local de este sábado.

En noviembre de 2021 tuvieron lugar fuertes protestas en el país, momento en que se exigió la dimisión de Roch Marc Christian Kaboré, quien estaba en el poder. Unos meses después el 24 de enero, militares bajo la autoridad de Paul-Henri Sandaogo Damiba tomaron el poder a través de un golpe de Estado, lo que representó el cuarto en África occidental desde agosto de 2020.