El presidente de la Federación de Juntas Vecinales de la ciudad de La Paz (Fejuve), Jesús Vera, informó este miércoles que más de 280 juntas vecinales, reunidas en consejo ampliado de emergencia, decidieron rechazar el paro convocado por cívicos cruceños y políticos de oposición para los días 10 y 11 de octubre.

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El líder comunal manifestó que la decisión de oponerse a la convocatoria de la derecha y no participar en la paralización del país obedece a que Bolivia necesita desarrollo.

Vera agregó que quienes ahora se presentan como cívicos “han estado muy aliados con el golpe de Estado de 2019, que ha ocasionado violaciones a los derechos humanos y muertes”.

Recalcó que las juntas vecinales de La Paz se declaran contrarias a esos autotitulados movimientos cívicos y no permitirán que se rearticulen los golpistas responsables de violaciones a los derechos humanos y masacres durante la gestión de facto de Jeanine Áñez.

Además, exhortó al alcalde de la urbe, Iván Arias, a no involucrarse en este paro y a no movilizar al personal del municipio, como lo hizo su antecesor, Luis Revilla.     

Al respecto, alertó que en estos momentos los líderes comunales “estamos organizados con las juntas vecinales en los cinco macrodistritos. Ya estamos haciendo nosotros vigilancia y estamos yendo a las oficinas para denunciar si hay funcionarios que están queriendo hacer algún tipo de bloqueo o paro en las zonas”.

Este miércoles, la Central Obrera Boliviana convocó para el 12 de octubre a una movilización y marcha en las principales ciudades del país. Ese día estaba prevista una concentración de masas en la ciudad de Cochabamba para oponerse a los golpistas, así como defender la Whipala y la revolución democrática y el proceso de cambios que adelanta el Gobierno del presidente Luis Arce.