El pasaporte sanitario será obligatorio en Italia para todos los trabajadores del sector público y privado hasta el 15 de enero de 2022, según el decreto anunciado este miércoles por el Consejo de Ministro ante el aumento de contagios por la Covid-19.

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La medida busca limitar la circulación de los ciudadanos que todavía no se han vacunado en los lugares con gran concentración de personas, como transporte público, bares, gimnasios, cines, teatros y centros recreativos.

Quienes no estén vacunados deberán acudir a sus lugares de trabajo luego de obtener resultados negativos en la prueba del coronavirus, que no deberá superar las 72 horas en el caso de ser PCR y las 48 en la de antígenos.

"Nuestra situación está empeorando ligeramente pero de forma constante, queremos ser muy cautelosos y evitar riesgos y poder así preservar lo que han logrado los italianos; queremos mantener la normalidad que hemos retomado, ese es el espíritu de las medidas", explicó el primer ministro italiano Mario Draghi.

La decisión también incluye que miembros de la Policía y de las fuerzas del Estado deben vacunarse obligatoriamente contra la Covid-19, además del personal docente, ya que solo se le exigía esto a los trabajadores sanitarios y de cuidados.

Italia es el primer país de Europa que adopta la medida de obligatoriedad para casi 23 millones de trabajadores en el sector público y privado, así como una de las más vacunadas, con el 84 por ciento de la población mayor de 12 años cubierta con dos dosis.

Según las autoridades sanitarias italianas, el país suma 4.954.585 casos de Covid-19 y más de 133.415 fallecidos por el virus.