La nueva reunión realizada este martes entre el primer ministro en funciones de Israel, Benjamin Netanyahu, y el líder opositor Benny Gantz, culminó sin acuerdo con respecto a la formación de un Gobierno en el país.

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El partido Likud, liderado por Netanyahu, aclaró que Gantz habría rechazado su propuesta para establecer una rotación en el cargo de primer ministro, con respaldo legal para que ninguna de las partes pueda violarla.

Netanyahu aseguró que, pese a sus “significativas” concesiones, el dirigente del partido Azul y Blanco, sigue eludiendo un Gobierno de coalición, mientras criticó que el segundo líder del grupo político, Yair Lapid, esté abiertamente opuesto a esa alternativa.

Por su parte, el partido opositor ha indicado que una de sus exigencias es que Gantz ocupe el cargo de primer ministro en el marco de un acuerdo rotatorio, al afirmar que están listos para la referida rotación.

"Yo tendré un mandato de dos años mientras usted intenta permanecer como líder del Likud", dijo Gantz a Netanyahu, en alusión a sus problemas legales tras su imputación por corrupción.

Después de transcurrir los 28 días concedidos por el presidente israelí Reuven Rivlin y no alcanzar ningún acuerdo para formar una coalición, tanto Netanyahu como Gantz han devuelto el mandato.

De no cumplir con este requerimiento, deberán celebrarse las terceras elecciones en menos de un año, luego de que en abril ninguna de las partes definiera un acuerdo.