El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, autorizó al Parlamento debatir en enero próximo una ley que permite a los Tribunales dictar órdenes de ejecución a personas acusadas de perpetrar "actividades terroristas", en su mayoría palestinos. 

La ley permitiría que los acusados sean condenados a muerte sin la necesidad de que los jueces estén de acuerdo, al contrario de como sucede en la actualidad en que por lo menos tres jueces deben estar de acuerdo de forma unánime para que el dictamen pueda llevarse a cabo. 

La propuesta fue impulsada por el socio en la coalición gubernamental Israel Nuestro Hogar y ministro de Defensa Avigdor Lieberman. 

Detractores de la ley aseguran que esta legislación es una nueva medida de ataque contra la población palestina. 

De acuerdo al diario digital Times of Israel, las autoridades militares se oponen a que se le realicen este tipo de reformas a la ley. 

Esta legislación también contempla la pena de muerte en casos de alta traición o particulares bajo ley marcial, pero en la actualidad se necesita que tres jueces estén de acuerdo con la medida, mientras que si cambia solo será necesaria que dos jueces den el visto bueno. 

Asimismo, señalan que esta medida busca trasladar por la fuerza fuera de sus comunidades en la ocupada Cisjordania, como medida punitiva, a los palestinos cuyos hijos realicen acciones de represalia.

Israel mantiene tras la rejas a más de 7.000 palestinos, de los cuales unos 500 están bajo "detención administrativa", categoría que permite mantener a las personas detenidas sin cargos ni juicios hasta siete meses. 

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