Las fuerzas de ocupación israelíes mataron el lunes a un adolescente palestino a sangre fría en un puesto de control militar cerca de la entrada a la ciudad de Al-Eizariya, al este de la Jerusalén ocupada.

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Testigos presenciales dijeron que las fuerzas de ocupación dispararon a Wadee' Oweisat, de 14 años, de la ciudad de Jabal al-Mukkaber y lo dejaron sangrar hasta que murió, supuestamente por intentar llevar a cabo un ataque con arma blanca.

Un vídeo publicado en las redes sociales mostró que las fuerzas de ocupación dejaron al niño sangrando sin brindarle tratamiento, hasta que sucumbió a sus heridas.

En otro vídeo, una mujer soldado aparece disparando a Owaisat a quemarropa, mientras éste estaba herido y sangrando en el suelo.

Este crimen recuerda a varios crímenes similares documentados en videos y fotografías, ya que las fuerzas israelíes no son ajenas a disparar a palestinos heridos y dejarlos sangrar hasta que mueran