Tres palestinos fueron asesinados este martes por la mañana por miembros de las fuerzas  israelíes en Cisjordania y el Negev (sur), en hechos registrados por separado, indicó el Ministerio de Salud de la Autoridad Nacional Palestina.

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Según la agencia de información Wafa, un palestino fue asesinado por elementos del ejército israelí en el campo de refugiados de Qalandia, al norte de Jerusalén; unas dos horas después otro civil fue abatido en el campo de Balata, en el norte de Cisjordania.

En la ciudad de Negev, al sur del país, otro joven resultó asesinado por miembros de una unidad encubierta de la policía israelí en un incidente en el cual otros seis heridos fueron trasladados al Complejo Médico Palestino.

El líder del Movimiento Jihad Islámico, Ahmad Al-Mudallal, en una entrevista con la radio local, declaró que "estos crímenes contra nuestro pueblo no pasarán desapercibidos y nuestra batalla está abierta contra la ocupación sionista".

Una fuerza israelí irrumpió en el campo de refugiados de Qalandia, lo que provocó el estallido de enfrentamientos con decenas de palestinos.

Testigos indicaron que el ejército utilizó balas reales y metálicas y botes de gas lacrimógeno durante los enfrentamientos.

Al mismo tiempo, las fuerzas de ocupación asaltaron el campamento de refugiados de Balata y la policía israelí confirmó en un comunicado el haberle disparado a un ciudadano árabe, lo cual provocó su muerte, durante una operación realizada por miembros de la unidad secreta en la ciudad de Rahat.

Desde principios de enero pasado, el Néguev es testigo de una revuelta contra el ataque de acoso e intimidación del que es objeto desde hace más de 3 meses, mientras las fuerzas de ocupación realizan una campaña de detenciones para intentar socavar el levantamiento popular.