La Cancillería de Irán convocó este domingo a los embajadores de Reino Unido, Francia y Alemania en protesta por el apoyo incondicional e irresponsable que dieron a Israel luego del contrataque iraní con drones y misiles lanzado el sábado.

LEA TAMBIÉN:

Irán defiende ante ONU su contrataque tras crímenes israelíes

Por medio de un comunicado, la Cancillería trasmitió a los diplomáticos que "la República Islámica de Irán, al tiempo que reitera su adhesión a los principios y objetivos de la Carta de Naciones Unidas, así como al Derecho Internacional, está decidida a defender resueltamente su soberanía, integridad territorial e intereses nacionales contra cualquier uso ilegal de la fuerza".

Las autoridades iraníes censuraron a Simon Shercliff (Reino Unido), Nicolas Roche (Francia) y Hans-Udo Motsel (Alemania) por las posiciones irresponsables que asumieron dichos países. 

Trasmitieron que la Operación Promesa Verdadera fue en legítima defensa y en respuesta al ataque de las fuerzas de ocupación israelíes contra el consulado iraní en Damasco, cuando Tel Aviv asesinó a 16 personas, entre ellas siete militares iraníes.

Recalcaron que atribuyen dicha agresión a Israel, que al perpetrarla violó la soberanía de Irán y Siria y comete otros crímenes, de ahí la acción militar en represalia de este sábado, que se justifica plenamente en el artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas.

Entre los líderes occidentales que apoyaron a Israel se situaron el primer ministro y el ministro de Exteriores de Reino Unido, Rishi Sunak y David Cameron, respectivamente. Ambos calificaron de imprudente la acción militar iraní y alegaron que inflamará la situación en Medio Oriente, cuestión que Irán refutó.

El canciller francés, Stéphane Sejourne, expresó a través de la red social X que con su ataque Irán alcanzó "un nuevo mínimo en sus actos de desestabilización y corre el riesgo de una escalada militar".

Por su parte, el canciller alemán, Olaf Scholz, catalogó de irresponsable e injustificable la acción militar con drones y misiles lanzada por Teherán contra la entidad sionista.

Reino Unido y Francia, junto a EE.UU. -que esta vez también apoyó a Tel Aviv-, rechazaron el 2 de abril pasado la convocatoria emitida por Rusia a una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad de la ONU para condenar el bombardeo israelí contra el consulado iraní en Damasco.