La segunda semana de enfrentamientos entre el ejército de Sudán y el grupo rebelde Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF, por sus siglas en inglés) inició el sábado en el país africano, un conflicto que ha dejado ya al menos 413 muertos y unos 3.551 heridos, según estima la Organización Mundial de la Salud (OMS).

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Aunque en horas de la noche del viernes descendió la intensidad de los combates en Jartum (capital), estos se reanudaron en la mañana del sábado, sin respetar los anuncios del Ejército de un alto al fuego para celebrar el fin del Ramadán y facilitar el arribo de la ayuda humanitaria.

En esta jornada trascendió además que el Ejército sudanés controla todos los aeropuertos a excepción de los ubicados en Jartum y Nyala, según declaró al medio televisivo Al Arabiya el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, Abdel Fattah al Burhan.

Al Burhan indicó que se encuentra al mando en el cuartel general y advirtió que el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido viola la tregua al desplegar sus efectivos en zonas residenciales de la capital y otras áreas.

Previamente, el Ejército había confirmado por medio de un comunicado, que se iniciaría un proceso de evacuación de las misiones diplomáticas de países como Estados Unidos (EE.UU.), Reino Unido, Francia y China que lo habían solicitado.

Los enfrentamientos iniciaron el pasado 15 de abril entre las fuerzas del Ejército y de las RSF. al mando de Mohamed Ahmed Daglo, como resultado de las divisiones entre ambos que iniciaron tras derrocar en 2019 al entonces presidente Omar al Bashir.