Efectivos del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) de Colombia desalojaron a un grupo de indígenas de la etnia Embera, asentados en Candelaria La Nueva, un barrio de la capital, Bogotá.

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Los miembros del pueblo originario habían sido desplazados de sus regiones de origen por la violencia de que fueron objeto por parte de grupos armados irregulares. En Candelaria La Nueva ocupaban una serie de apartamentos, de los que fueron expulsados este jueves.

Diversas denuncias se han publicado en redes sociales, acompañadas de videos ilustrativos de la fuerza pública, los que se aprecian actuando contra los indígenas completamente equipados con armas e implementos antidisturbios.

La Organización Nacional Indígena de Colombia rechazó esta actuación del Estado. “Rechazamos el abuso por parte de la Policía de Bogotá hacia un grupo de indígenas del pueblo Embera desplazados por la violencia que habrían sido desalojados. Solicitamos a la alcaldesa Claudia López brindar garantías humanitarias”, twiteó la institución.

Organizaciones y representantes de nacionalidades indígenas han denunciado reiteradamente que miembros de pueblos originarios han sido desalojados a lo largo y ancho del país. Bogotá, Cúcuta, Cali, entre otras ciudades, han sido escenario de los desalojos.

Los indígenas denuncian, además, que no se sienten protegidos por el Gobierno, ya que la propia fuerza pública es la que protagoniza la puesta en práctica de las órdenes de desahucio.