Un nuevo devastador incendio azotó California, Estados Unidos (EE.UU.), en la madrugada del jueves. El fenómeno natural provocó la evacuación de al menos 40.000 personas. 

Las autoridades de California han anunciado un estado de emergencia, ya que el incendio ha destruido más de 8.000 hectáreas en menos de 24 horas y 1.000 viviendas. 

Más de 2.000 bomberos participan en las labores para apagar las llamas y atienden a los heridos por quemaduras.

El gobernador en funciones de California, Gavin Newsom, pidió al Gobierno federal una declaración presidencial de emergencia para poder tener acceso a recursos económicos y financieros para cubrir las necesidades del Estado en medio del desastre natural. 

Los incendios en California no son un evento nuevo, sin embargo, han incrementado y son violentos, peligrosos y han arrojado un saldo importante de lesionados y fallecidos. Además, han dejado millonarias pérdidas materiales. 

En julio los bomberos habían dado por controlado los incendios en el condado de Mendocino, considerados los de mayor envergadura en la historia de California. 

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