El proyecto "Costes de la guerra", de la Universidad estadounidense de Brown, ha calculado el número total de personas desplazadas por las guerras libradas por Estados Unidos desde 2001, cifrándolas en 37 millones.

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El informe, publicado este martes, por The New York Times, refiere el saldo de las personas que han sido obligadas a abandonar sus lugares de residencia como consencuencia directa de las guerras comenzadas por Estados Unidos a partir del 6 de octubre de 2001, con el ataque a Afganistán, en represalia por los atentados del 11 de septiembre anterior.

Según David Vine, autor principal del informe, la cifra real podría ser todavía mayor y oscilar entre 48 y 59 millones de desplazados en una demostración, a su juicio, de que las guerras desatadas por George W. Bush (2001-2009) y continuadas y ampliadas por Barack Obama (2009-2017) y Donal J. Trump (desde 2017) han sido "horriblemente catastróficas".

De acuerdo con el informe de la Universidad de Brown esa cifra de 37 millones de desplazados en todo el mundo, sería el mayor exilio debido a un conflicto armado desde comienzos del siglo XX, si no se toma en cuenta la Segunda Guerra Mundial (1939-1945).

Los mayores números de desarraigados se han dado en Iraq (9,2 millones), Siria (7,1 millones) y Afganistán (5,3 millones), seguidos de Pakistán, Yemen, Somalia, Libia y Filipinas, cuyos desplazamientos a raíz de estas guerras han sido, sobre todo, internos.

Los investigadores estiman que unos 25,3 millones de desplazados habrían regresado, aunque eso "no es suficiente para borrar el trauma del exilio forzado" y no significa que los retornados hayan regresado a una vida en seguridad o en las condiciones iniciales.