El Gobierno de Cuba denunció este jueves el programa de la Agencia Internacional para el Desarrollo (USAID) de Estados Unidos (EE.UU.) que destina fondos millonarios para “obstaculizar, desacreditar y sabotear” la cooperación médica de la Mayor de las Antillas.

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De acuerdo a un comunicado oficial de la cancillería cubana, la reciente agresión de EE.UU. “es un empeño que se suma a las groseras presiones ejercidas contra varios gobiernos para obstaculizar la cooperación cubana”.

Asimismo, el documento califica de "calumnia inmoral" el alegato de que la Isla incurre en la trata de personas o la práctica de la esclavitud, y rechaza que se denigre la labor que desarrollan cientos de miles de profesionales y técnicos del sector de la salud cubanos en varios países del mundo.

El ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba enfatiza que la postura estadounidense es una "injuria" contra los programas bilaterales e intergubernamentales de cooperación, los cuales son legítimamente establecidos entre el Gobierno cubano y decenas de gobiernos de otros países.

Además, las autoridades de Cuba expresaron que los acuerdos de colaboración de salud firmados responden a los requerimientos que las otras naciones definen y son consecuentes con las pautas de las Naciones Unidas referidas a la cooperación Sur-Sur.

Igualmente, el comunicado subrayó que los intercambios son totalmente justos y legítimos entre países en vías de desarrollo, muchos de los cuales carecen de una cobertura de salud exitosa, por lo que Cuba lleva sus experiencias.

“En los casos en que Cuba recibe compensación por la cooperación prestada, esos colaboradores tienen el mérito de brindar un aporte altamente valioso, justo y totalmente legítimo para el financiamiento, la sostenibilidad y el desarrollo del sistema de salud” en el país, según estableció la declaración.

El texto cierra con la afirmación de que el acceso a la salud es un derecho humano y los EE.UU. cometen un crimen al pretender negarlo y obstaculizarlo con motivos políticos o de agresión.