La Policía de París utilizó gases lacrimógenos para dispersar una multitudinaria protesta en la ciudad francesa que tenía lugar este sábado para condenar la violencia policial y el racismo.

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La manifestación que logró reunir a unas 20.000 personas derivó en un enfrentamiento entre grupos antifascistas y miembros del grupo ultranacionalista conocido como Los Identitarios.

La concentración fue convocada por la portavoz del comité "Verdad y Justicia para Adama", Assa Traore, cuyo hermano, un joven de raza negra y que identifica al movimiento, murió bajo custodia policial en el año 2016 al norte de la capital.

"Hoy nos reunimos para denunciar la violencia policial. Nos reunimos para denunciar la violencia social. Nos reunimos para denunciar la violencia racial", afirmó Traore ante la multitud.

Por su parte, los simpatizantes de la discriminación racial desplegaron un cartel desde la azotea de un edificio para enarbolar lo que ellos denominan "racismo anti-blanco" que causó la reacción inmediata de los residentes en el inmueble.

En su discurso, Traore hizo un paralelismo entre la muerte de su hermano y la del afroamericano, George Floyd, en Estados Unidos el pasado 25 de mayo, también durante una detención policial.

Estos movimientos sociales han reactivado el debate contra el racismo en Francia y el cuestionamiento hacia las tácticas de represión de las fuerzas de seguridad en el país europeo.