El ministro del Interior francés, Gérald Darmanin, informó este viernes la detención de al menos 310 personas, 258 en París (capital), durante las protestas contra la controvertida reforma de pensiones del Gobierno de Emmanuel Macron.

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Reprimen protestas en rechazo a reforma de pensiones en Francia

Este jueves, el Gobierno se acogió al artículo 49.3 de la Constitución francesa para aprobar la norma sin votación en la Asamblea Nacional, dando luz verde con ello a la maniobra de elevar la edad de jubilación de 62 a 64 años. Como consecuencia, cientos de miles de personas salieron a las calles de varias ciudades del país.  

Miles de personas se reunieron en la Plaza de la Concordia, en París, bajo la consigna de “bloquear el país” y la meta de quitar al actual Gobierno. Algunos manifestantes quemaron contenedores, montaron barricadas y destruyeron automóviles.

Las fuerzas de seguridad usaron cañones de agua y gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes en el referido escenario, convertido en el núcleo de las protestas contra la legislación, pero los enfrentamientos se trasladaron a otras zonas, como los Campos Elíseos.

El presidente francés, Emmanuel Macron, y su Gobierno enfrentan una crisis política tras la aprobación por decreto y sin voto en la Asamblea Nacional de la nueva reforma de las pensiones.

La decisión, tomada tras la tercera reunión del día en el Elíseo, entre Macron, varios miembros del Ejecutivo y su primera ministra, Élisabeth Borne, dio paso a la  petición de mociones de censura por parte de la izquierda y la derecha políticas. Además, se demandó la dimisión de la jefa del Gobierno.

Borne informó ante la Asamblea Nacional el recurso del Gobierno al artículo 49.3 de la Constitución para aprobar la medida. Tras el anuncio, se presentaron dos mociones de censuran, una de la izquierda y otra de la extrema derecha.

El grupo Libertés, Indépendants, Outre-mer et Territoires (Liot), presentó una moción de censura, firmada por 91 asambleístas de cinco partidos políticos, con el objetivo de derrocar a Borne.

La líder ultraderechista, Marine Le Pen, recalcó que Borne no puede seguir en su puesto. Asimismo, adelantó que su grupo votará a favor de cualquier moción de censura, aunque sea de la izquierda, tras la decisión del Ejecutivo de esquivar el voto de la Asamblea Nacional.