La Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) resaltó este viernes que el índice de referencia de los precios internacionales de los productos alimentarios se incrementó por vez primera en un año debido al alza de cotizaciones como el azúcar, la carne y el arroz.

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La organización internacional subrayó que “el índice de precios de los alimentos que hace un seguimiento de las variaciones mensuales de los precios internacionales de los productos básicos más comercializados, alcanzó una media de 127,2 puntos en abril”.

Estos datos, según refiere el ente representan un 0,6 por ciento más que en el mes de marzo, mientras que el índice se situó un 19,7 por ciento por debajo del nivel de abril de 2022, sin embargo se notifica un 5,2 por ciento más alto que lo reportado en abril de 2021.

De igual manera, la FAO indicó que el índice para los precios del azúcar se elevó un 17,6 por ciento con respecto a marzo, lo que indica el porcentaje más alto desde el 2011, específicamente el correspondiente al mes de octubre.

Entre los factores que reconoce el organismo se encuentran “el lento comienzo de la cosecha de la caña de azúcar en Brasil”, el aumento a nivel internacional de los precios del petróleo y la reducción de los resultados de producción en la India, China, Tailandia y la Unión Europea debido a las condiciones meteorológicas secas.

Así, la carne subió su costo (un 1,3 por ciento en el mes) y las causas están asociadas, de acuerdo a la FAO con “el incremento de cotizaciones de la carne de cerdo, seguido de los precios de las aves de corral, que aumentaron en medio de la demanda asiática de importaciones y las restricciones a la producción espoleadas por problemas de sanidad animal”.

Por su parte, el economista jefe de la organización, Máximo Torero puntualizó que “el aumento de los precios del arroz es extremadamente preocupante y es esencial que se renueve la iniciativa del Mar Negro para evitar otros picos en el trigo y el maíz”.

De acuerdo a los datos presentados por la FAO, la producción mundial de trigo se sitúa en 785 millones de toneladas, la segunda mayor de la historia, “debido al descenso en Australia y Rusia respecto a sus producciones récord de 2022”.