El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, comunicará este lunes si dimite o no a su cargo en medio de una serie de movilizaciones y de solidaridad de dirigentes socialistas que le han expresado su apoyo.

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Tanto en el Gobierno como en el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) aseguran que la decisión de Pedro Sánchez es meramente personal y que no se trata de una estrategia, después de la campaña de acoso que el líder considera que está sufriendo por parte de los partidos de derecha y organizaciones de ultraderecha.

El jefe del Ejecutivo español, anunció el pasado miércoles que se daba unos días de reflexión para decidir si continuaba o no al frente del gobierno.

La incógnita se mantiene sobre el camino por el que ha optado Pedro Sánchez e incluso sobre la hora en la que comparecerá en la sede de la Presidencia del Gobierno, el Palacio de la Moncloa.

El anunció de la apertura de diligencias por parte de un juzgado de Madrid contra la pareja del mandatario español, Begoña Gómez por una denuncia presentada por la organización Manos Limpias ligada a sectores de ultraderecha fue el detonante de la decisión de Pedro Sánchez de decidir o no su dimisión.

Begoña Gómez está siendo investigada por los supuestos delitos de tráfico de influencias y corrupción.

En medio de la incertidumbre política, la sede del PSOE fue el escenario de una concentración multitudinaria a favor de Pedro Sánchez.

"Pedro, quédate", fue el mensaje con el que la número dos del Gobierno y del PSOE, María Jesús Montero, abrió su intervención en la reunión del Comité Federal de la agrupación política
y el que secundaron el resto de dirigentes del partido.

También se han registrado movilizaciones durante el fin de semana pidiendo a Sánchez que continúe al frente del Gobierno.