El barco de la organización Open Arms llegó este miércoles a Barcelona, España, con 60 migrantes que fueron rescatados el pasado sábado de las aguas del Mediterráneo.

Tras ser rechazados por los Gobiernos de Italia y Malta, los migrantes permanecieron cuatro días a la deriva en el Mediterráneo. 

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Pese a que 60 personas, entre ellas cinco mujeres y cinco niños, fueron rescatadas, las acciones de Italia y Malta costaron la vida de 340 migrantes, quienes murieron por tener que alejarse de la zona pues solo tenían permiso para desembarcar en Barcelona, dijo el fundador de Proactiva Open Arms, Óscar Camps.

Se trata de la segunda vez en un mes que un barco con rescatados debe navegar durante varios días para llegar a puerto seguro, debido al rechazo de países cercanos: Italia y Malta.

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Camps instó a las autoridades de Transporte de Italia a cumplir con el derecho marítimo internacional y señaló que Italia posee ciudades que pueden ser favorables a las actividades de salvamento que desarrolla la organización que representa.

El fundador de Open Arms recordó a aquellos que impiden la entrada de barcos con personas rescatadas que "no hay migrantes, hay navegantes o náufrago. Y lo que rescatamos son vidas en peligro y no migrantes en peligro. Son vidas en peligro".