El expresidente del Gobierno de Cataluña, Quim Torra, solicitó este martes al Tribunal Constitucional que suspenda su inhabilitación al frente del gobierno autonómico, el cual se confirmó e hizo efectivo la víspera con una sentencia del Supremo, desde Madrid, en lo que estallaron manifestaciones de protesta en Barcelona.

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En su recurso, la defensa de Torra argumenta que la suspensión "de forma urgente" de la condena es necesaria para evitar el "daño irreparable" que la ejecución de la misma causaría tanto al propio expresidente autonómico, así "como a terceras personas".
     
Boye invoca, en ese sentido, la especial trascendencia constitucional del recurso de amparo ya que la sentencia supone el cese de quien tiene la más alta representación en la administración de la comunidad autonómica y dirige la acción del Gobierno, y que conlleva asimismo "el cese de todo su Gobierno".

Torra, por su parte, ha llamado al gobierno de coalición del PSOE-Unidas Podemos y a los partidos catalanes a apoyar una ley de amnistía "para los presos y para los 2.850 represaliados", tras visitar a los presos independentistas en la cárcel de Lledoners (Barcelona), en su primer acto desde que ya no está al frente de la presidencia de Cataluña.

Fue todavía más allá en sus dichos: "emplazo al gobierno que, tras 11 meses del gobierno más progresista de la historia, a resolver el conflicto catalán, y esto pasa por la amnistía y el derecho a la autodeterminación", recalcó.

Tras la inhabilitación de Torra, hecha efectiva el lunes con sentencia firme del Tribunal Supremo, ha asumido, de manera interina Per Aragonés como nuevo presidente catalán.