El empresario brasilero Luciano Hang fue imputado por el Ministerio Público del Trabajo de Santa Catarina (MPT-SC), ente que presentó una acción civil en su contra, por presionar a sus trabajadores y favorecer al ultraderechista Jair Bolsonaro en las elecciones presidenciales. 

El el entre de de Santa Catarina alega que hay pruebas de que la empresa Havan "realizó encuestas electorales entre sus empleados practicando acoso con interés de interferir el voto" para que este favoreciera al ahora presidente electo en los pasados comicios de Brasil. 

La fiscalía solicita al empresario 25 millones de reales para indemnizaciones por daños colectivos, 5 millones de reales por daños individuales (que deberán ser pagados a cada uno de los 15.000 trabajadores de la empresa), lo que suma un total de 75 millones de reales.

En este sentido, el juez  juez Carlos Alberto de Castro expresó que la sola "formulación de encuestas sobre la intención de votos ya invade la intimidad y la privacidad de los empleados, pues el voto es secreto y se debe garantizar que la persona no quería manifestarse al respecto".

Añade que la "situación se agrava cuando, posteriormente a este hecho, se pone en jaque el empleo de todos los 15.000 empleados".

El informe fiscal señala que Hang "amenazaba con cerrar puestos de trabajo si su entonces candidato Jair Bolsonaro (PSL) no fuera elegido presidente de la República".

Las acciones del empresario fueron catalogadas por la fiscalía como "graves", ya que considera "que tanto Constitución Federal como la democracia y la libertad de elección política de los funcionarios estuvo comprometida".

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