El presidente tunecino, Kais Saied, dijo durante una reunión con la primera ministra Najla Boden el jueves por la noche que las elecciones parlamentarias no se llevarán a cabo después de 3 meses de disuelta el parlamento local, confirmó este viernes una publicación presidencial en Facebook.

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Saeed manifestó su asombro por el discurso sobre la necesidad de realizar elecciones parlamentarias dentro de los 3 meses posteriores al anuncio de la disolución de la Asamblea de Representantes del Pueblo y, al presentar los resultados de la consulta electrónica sobre reformas constitucionales y legales.

El artículo 89 de la Constitución tunecina establece que si se disuelve la Cámara de Representantes, se deben celebrar elecciones legislativas en un plazo no menor de 45 días y máximo de 90 días. 

El presidente tunecino también subrayó que el diálogo no será con los que querían derrocar al Estado, los que saquearon sus recursos y los que recurren a la violencia y dividen al pueblo, dijo.

Naciones Unidas expresaron su preocupación por la decisión de Kais Saied de disolver el parlamento, mientras que el movimiento Ennahda y otras fuerzas políticas denunciaron la decisión como una violación de la constitución, en medio de crecientes llamados a organizar elecciones anticipadas.

En Nueva York, Farhan Haq, portavoz del secretario general de las Naciones Unidas, expresó la preocupación de la organización por la decisión del presidente tunecino Kais Saied de disolver el parlamento, llamando a todas las partes a abstenerse de cualquier acción que lleve a más tensión política.

Saeed reiteró el jueves, que la aprobación por el parlamento, durante la sesión plenaria celebrada el miércoles, de una ley que cancela las medidas excepcionales anunciadas por el presidente el pasado 25 de julio, fue un intento fallido de golpe de Estado y una conspiración contra él, el Estado y un intento desesperado de socavar su unidad.

El presidente tunecino anunció el miércoles, la disolución del Parlamento, que ha estado congelado durante más de 8 meses, con base en el Capítulo 72 de la Constitución, y lo justificó preservando el Estado y sus instituciones, acusando a los diputados que se reunieron cancelar las medidas excepcionales de conspiración contra el Estado.

La decisión de Saeed de disolver el parlamento se produjo después de una reunión de parlamentarios realizada a distancia, en la que votaron por 116 del total de 217 diputados a favor de cancelar los decretos presidenciales excepcionales que otorgan al presidente poderes casi absolutos, el principal de los cuales es la orden presidencial.