En un oficio dirigido a la Secretaría Pro Témpore de la Unión de Naciones Suramericanas, este lunes el gobierno ecuatoriano oficializó la decisión de suspender su aplicación y denunciar el Tratado Constitutivo de Unasur y así retirarse del bloque. 

LEA TAMBIÉN:
Unasur: Unión latinoamericana bajo el sueño de Simón Bolívar

“Ecuador dejará de participar en todas las actividades y compromisos del organismo e iniciar los procedimientos internos para la denuncia del tratado”, expresó el ministro de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana de Ecuador, José Valencia, a su contraparte boliviana, Diego Pary, cuyo país está a cargo de la Secretaría Pro Témpore.

De esta manera, el gobierno de Lenín Moreno se convierte en el segundo que oficializa su retiro, uniéndose al presidente colombiano Iván Duque, que el 27 de agosto de 2018 informó una decisión similar. Desde abril de 2018, Argentina, Brasil, Chile, Paraguay y Perú suspendieron su participación, dejando a Venezuela, Bolivia, Guyana, Surinam y Uruguay como miembros activos. 

La decisión se realiza seis meses después de que el Canciller ecuatoriano descartó públicamente que su país abandonaría el organismo durante una rueda de prensa donde, a su vez, anunció el retiro de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP). 

Por su parte, el ex presidente Rafael Correa, expresó en su cuenta de Twitter que con este acto “firman la sentencia de muerte del organismo”. Dicha posible disolución se produce en momentos críticos para los gobiernos de derecha de la región ya que el presidente chileno, Sebastián Piñera, propone un nuevo bloque regional, denominado Prosur. 

Sin embargo, el retiro de Ecuador no será inmediato. Según el art. 24 del Tratado Constitutivo de Unasur, la denuncia surtirá efectos una vez transcurrido el plazo de seis meses desde la fecha en que la notificación haya sido recibida por el Depositario. A su vez, la Constitución ecuatoriana del 2008 señala que las denuncias a tratados internacionales tendrán que pasar obligatoriamente por la Asamblea Nacional. 

Una vez oficializada la separación, la Sede, que se encuentra en Quito, y cuyo inmueble fue donado por el gobierno de Rafael Correa volverá a las manos del Estado, dejando sin edifico al organismo. En julio de 2018, Lenín Moreno anunció sus planes para el edificio, donde espera crear una universidad intercultural. 

Unasur promueve la integración regional desde su creación en Brasilia el 23 de mayo de 2008, bajo el impulso del líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez.