El Ministerio de Relaciones Exteriores de Ecuador informó este jueves que no ha recibido ninguna comunicación oficial del Gobierno de España sobre un supuesto comportamiento inadecuado del presidente Daniel Noboa durante su visita en enero pasado a la nación europea.

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A través de un comunicado, la Cancillería rechazó el artículo difundido durante esta jornada por un medio español, el cual señaló que tras la agenda oficial el mandatario protagonizó un escándalo en un restaurante y empleó la escolta y los automóviles oficiales puestos a su disposición para ir de fiesta, lo cual motivó una queja oficial del Ministerio de Exteriores español a la Embajada de Ecuador en Madrid.

La Cancillería ecuatoriana rechazó categóricamente el contenido del trabajo periodístico y señaló que "carece de veracidad". Añadió que tales aseveraciones "son falsas y buscan dañar la buena imagen del Gobierno nacional".

Negó que se haya recibido alguna comunicación oficial del Gobierno español. Aseguró que "el Ministerio de Relaciones Exteriores de España también desmintió esta información".

Asimismo, expresó que la representación diplomática ecuatoriana en España "mantuvo, en todo momento, una adecuada coordinación con las instancias diplomáticas correspondientes para el cumplimiento de la agenda oficial llevada a cabo en ese país".

Según medios ecuatorianos, la Cancillería local demoró dos horas para difundir el breve desmentido ante su insistencia en recabar una información pública del asunto.

Un periódico local se comunicó con el Ministerio de Relaciones Exteriores español y este respondió que no se emitió queja formal, que toda la comunicación con la Embajada ecuatoriana fue por cuestiones logísticas y que la Exteriores solo acompaña al visitante durante la agenda oficial.

Además de los supuestos hechos ya referidos, El Debate publicó que Noboa lanzó billetes al aire en el restaurante japonés Ikigai, dijo que quería irse de juerga y subió al auto oficial con cierta dificultad y ayudado por sus escoltas. 

Añadió que, una vez en el hotel, organizó una fiesta privada hasta altas horas de la madrugada, luego de lo cual llegó con retraso a una reunión que tenía a primera hora al día siguiente y no se disculpó con sus interlocutores. Según el medio, estos hechos fueron presenciados por la comitiva oficial.