El presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, instó este jueves a la población a tomar medidas preventivas ante el impacto que pueda generar la llegada de la onda tropical número 13, resaltando que "un gramo de prevención vale un kilo de cura".

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“Todas las entidades están preparadas y el apoyo del pueblo de Costa Rica es muy importante y les pedimos a las comunidades que se podrían ver afectadas, o con altas probabilidades, tomar las medidas correspondientes y atender el llamado de las autoridades y no exponerse”, dijo Chaves.

La declaración se realizó tras una reunión del Centro de Operaciones de Emergencia (COE) para definir las acciones para enfrentar venidera tormenta tropical.

De acuerdo con el mandatario, tienen listo el decreto de emergencia en caso de que la onda se convierta en ciclón y, en caso de dejar daños, se dispondrá de un presupuesto para la reconstrucción de infraestructura.

Durante el encuentro con la prensa, el director del Instituto Meteorológico Nacional (IMN), Werner Stolz, detalló que la tormenta tendrá un importante impacto entre el viernes y el sábado venidero, mientras se mantiene la trayectoria prevista a una velocidad de 31 kilómetros por horas, con vientos de 65 kilómetros por hora.

Según Stolz, entre las regiones más afectadas por lo que se convertiría en la tormenta tropical Bonnie serían la Zona Norte, Caribe Norte y gran parte del Litoral Pacífico.

Por otra parte, la ministra de Educación Pública, Anna Katharina Müller, aseveró que las clases quedarán suspendidas en todo el país a partir del mediodía del viernes próximo.

A su vez, el presidente de la Comisión Nacional de Emergencias, Alejandro Picado, recordó la alerta naranja decretada en casi todo el país, así como el paso de alerta verde a amarilla para la zona del Caribe sur.