La Corte Internacional de Justicia (CIJ) se retiró este jueves a deliberar sobre el caso que concierne al “estatus y uso de las aguas”  del Silala, luego de que Chile y Bolivia, las naciones en disputa, presentaran sus alegatos desde hace dos semanas.

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La jueza presidente del alto tribunal de la ONU, Joan Donoghue, declaró al término de las intervenciones que “la Corte se retirará a deliberar, los agentes de las partes serán notificados a su debido tiempo acerca de la fecha en la que la corte dictará su fallo”.

Si bien la Corte no ha establecido un fecha límite para la deliberación, solicitó a las parte que se mantengan disponibles para consultas adicionales a solicitud de La Haya.

Durante las intervenciones, el agente de Bolivia y embajador de este país en Países Bajos, Roberto Calzadilla, defendió la soberanía de La Paz sobre el recurso fluvial y pidió que su contraparte ofreciera una compensación por los años de explotación con fines comerciales.

La agente de Santiago, Ximena Fuentes, expresó que los daños ocasionados por el desmantelamiento de las canalizaciones de la obra afectan el caudal auperficial, esto no será considerado de por sí una violación del derecho internacional consuetudinario”.

Tanto Fuentes como Calzadilla solicitaron el reconocimiento del "curso de agua internacional" del Silala, alegato que acercó las posturas de ambas naciones, que rompieron relaciones diplomáticas desde 1978.

El fallo de la Corte será inapelable y se prevé influirá en el posterior desarrollo de las relaciones entre Chile y Bolivia, así como en las actividades económicas y medioambientales que tengan lugar en Potosí y Antofagasta.

Se dará término así a una disputa legal que comenzó en 2016 cuando Chile demandara a Bolivia a fin de que el Silala fuese declarado un recurso de curso internacional.