Representantes de ocho comunidades indígenas del departamento del Valle del Cauca, en Colombia, se movilizan este miércoles a Bogotá, capital del país, para reunirse con el Gobierno federal ante la situación de zozobra y vulneración a los derechos humanos que persiste en sus territorios.

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El olvido histórico estatal y la presencia de actores armados provocan que estos pueblos vivan bajo un contexto de violencia, confinamientos, desplazamientos, amenazas y estigmatización. En ese sentido, cinco de los 40 líderes sociales asesinados en lo que va de año en el territorio colombiano pertenecían a dicha comunidad.

El consejero general de la Organización Nacional Indígena en Colombia, Gerardo Jumi, explicó que los participantes se dirigen a la urbe principal para “apoyar las reformas y denunciar la xenofobia de algunos funcionarios como el fiscal general de la nación, Francisco Barbosa, quien descalificó la capacidad de contratación legal que tienen estos pueblos y sus autoridades”.

Asimismo,  se van a referir al Congreso de la República, cuyo presidente dijo desconocer “la consulta previa a estos pueblos y sus autoridades sobre el Plan Nacional de desarrollo”, afirmó.

Más de mil participantes mingueros iniciaron el recorrido la víspera al mediodía y esperan llegar este miércoles a la capital de la república, específicamente al Ministerio del Interior para ser escuchados por el ministro Alfonso Prada.

Con esta reunión comenzarán la ruta de encuentro con las entidades gubernamental con el fin de que sus demandas sean contempladas en los cambios del nuevo Gobierno.