China negó este lunes versiones sobre una supuesta prueba de un misil hipersónico con capacidad nuclear a principios de este agosto de este año, y a cambio, afirmó que se trató de un vehículo de pruebas rutinarias para verificar tecnologías de reutilización aeroespacial.

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"No era un misil, era un vehículo espacial", dijo el portavoz del ministerio de Asuntos Exteriores, Zhao Lijian, cuándo se le  preguntó sobre el tema, y agregó que había sido una "prueba de rutina" con el propósito de probar la tecnología para reutilizar el vehículo.

Zhao afirmó que el lanzamiento era de "gran importancia para reducir el coste de uso de las naves espaciales y podría proporcionar una forma conveniente y asequible de hacer un viaje de ida y vuelta para el uso pacífico del espacio por parte de la humanidad".

El vocero de Exteriores rechazó la versión del periódico The Financial Times, que consultando diferentes fuentes del Gobierno de EE.UU reveló la prueba del misil supersónico, una tecnología que buscan desarrollar las grandes potencias.

El misil supersónico puede ser usado como "arma nuclear espacial" que puede evadir los sistemas de defensa antimisiles y atacar en cualquier parte del mundo.

Los acontecimientos se producen en medio de crecientes tensiones entre China y Estados Unidos, donde, según informes, las agencias de inteligencia fueron "tomadas por sorpresa" por la supuesta prueba de misiles.