La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) inició este lunes un juicio contra el Estado brasileño debido a la omisión de los implicados en al asesinato del trabajador rural y miembro del Movimiento Sin Tierra (MST), Antonio Tavares, durante la represión de una marcha por la reforma agraria ocurrida el 2 de mayo de 2000, en Campo Largo.

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En este sentido, el organismo precisó que durante la audiencia se examinará las heridas sufridas por a 185 miembros del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), tras la represión desatada por los agentes de la policía militar.

De acuerdo con la autoridad judicial, será enjuiciado el actual Gobierno brasileño pues si bien el caso no tuvo lugar durante la presidencia de Jair Bolsonaro, corresponde a la actual mandatario responder como Estado a la sentencia.

Los representantes de las víctimas ante la Corte Interamericana solicitan que el Estado adopte medidas de justicia, reparación, memoria; así como la dotación de tierras públicas para la realización de la reforma agraria.

 Desde el año 2014, los demandantes del caso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Comisión de Pastoral de la Tierra (CPT), Red Nacional de Abogados y Abogados Populares (RENAP) y el Estado brasileño iniciaron negociaciones para tratar de encontrar una solución viable, pero todos se vieron frustrados.

Vale precisar que el juicio integra el 149 Período Ordinario de Sesiones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos y tiene lugar en San José, Costa Rica, sede de la Corte.