"Hay la sospecha de una acción planeada, la sospecha de una actuación que fue largamente cultivada para llegar a este resultado", declaró la fiscal general de Brasil, Raquel Dodge, en referencia a los graves incendios que tienen lugar en la Amazonía.

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Poco antes de brindar las referidas declaraciones, Dodge se reunió con la comisión Amazonía, creada por la Fiscalía, la cual pedirá abrir una investigación para esclarecer el origen de los fuegos.

"Como resultado de la reunión de hoy, estoy solicitando la apertura de investigación para promover la persecución penal de aquellos que incentivaron que las quemadas fueran adoptadas en tierras federales", declaró la titular, quien aseguró que existen “elementos que justifican” tal medida.

As queimadas na Amazônia estão sob investigação, Raquel Dodge suspeita que tenha sido um ato orquestrado para causar um desgaste na imagem do governo brasileiro. Que os responsáveis sejam severamente punidos! pic.twitter.com/25xKefvldS

— Movimento Muda Brasil de Verdade (@mudabrdeverdade) 27 de agosto de 2019

La fiscal explicó que la pesquisa buscará los incentivos de quienes quemaron en tierras federales y áreas protegidas federales, pero se negó a decir cuántos sospechosos forman parte actualmente del proceso.

Por su parte, el abogado Joel Bogo, presente en la reunión, explicó en una entrevista que organizaciones criminales han sido denunciadas por estos crímenes y existen investigaciones iniciadas por el grupo de trabajo del Ministerio Público Fiscal (MPF) en la Amazonía, en cuyo foco se encuentran grandes ganaderos.

"La deforestación ilegal de grandes proporciones es practicada por agentes del crimen organizado, incluida la capitalización, la deforestación costosa, no se deforesta sin capital ni recursos", dio a conocer, detallando que el gasto para deforestar mil hectáreas es de un millón de reales.

A su vez, el coordinador de la Cámara de Medio Ambiente del MPF, fiscal general adjunto Nivio de Freitas, consideró que la práctica de las “quemadas” asociada a las labores agrícolas, en realidad va en contra de la agricultura y de los intereses de quienes cultivan la tierra dentro de la ley.

Freitas también destacó que las organizaciones no gubernamentales (ONG) trabajan en colaboración con agencias públicas en la solución de la crisis de los incedios, destimando así la participación de las ONG en la quema de la región, sospecha infundada planteada por el presidente Jair Bolsonaro.

Este domingo, la Policía Federal anunció que investigaría la existencia de una convocatoria para realizar quemadas en el estado de Pará, después de que un diario regional publicara un anuncio para "el día del fuego".

Según los datos del Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales, más de la mitad de los 79.500 incendios de los que se tiene constancia en Brasil, entre el 1 de enero y el 24 de agosto de 2019, fueron en la selva amazónica, lo que representa un aumento del 82 por ciento respecto al mismo período del pasado año.