El Producto Interno Bruto de Brasil (PIB) se contraerá cerca de un 0.11 por ciento debido al alza de los precios de la energía provocada, sobre todo, por la sequía que afecta a ese país sudamericano, según un informe publicado por la Confederación Nacional de Industria (CNI).

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Detalla el documento que la peor crisis hídrica de esta nación en 91 años ha traído como consecuencia la pérdida de cerca de 8.200 millones de reales (cerca de 1.450 millones de dólares).

Este aumento en el precio de la energía reduce el consumo de los hogares en el mercado interno por una cifra cercana a los 7.000 millones de reales (cerca de 1.230 millones de dólares), además de que las exportaciones se afectarían en una cifra aproximada de 500 millones de dólares y se perderían cerca de 165.000 empleos.

La crisis hídrica ha descendido a niveles críticos las reservas de las centrales hidroeléctricas de la zona centro occidental del país y la región sur, lo que representa el 70 por ciento de la energía de este tipo en Brasil.

Además de la nefasta situación con el agua, el informe ha señalado que es determinante la “alta tarifa eléctrica en el país, que contiene 16 cargos, impuestos y tarifas sectoriales incorporados a la factura, las cuales corresponden al 47 por ciento del costo total del servicio energético”.

El presidente de la CNI, Robson Braga de Andrade admitió que “el alto costo de los impuestos, las cargas sectoriales y los errores regulatorios hicieron que la electricidad que paga la industria sea una de las más caras del mundo”.

El texto recuerda que incluso antes de la crisis hídrica, el precio de la energía eléctrica en Brasil ya era uno de los principales obstáculos para hacer mucho más competitiva al ramo industrial de ese país.