El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, volvió a minimizar los impactos de la Covid-19 al afirmar que quedarse en casa para evitar contagiarse con el nuevo coronavirus "es para los débiles".

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Las declaraciones del mandatario brasileño se dan cuando el país registró en las últimas 24 horas 39.797 casos y 858 muertes a causa del virus. El número total de personas infectadas por el virus desde febrero llegó a 4.495.183.

Durante un evento con productores rurales celebrado este viernes en el estado de Mato Grosso, Bolsonaro trató con desdén una de las principales medidas para contener el virus.

"No se detuvo durante la pandemia. No entró en la pequeña charla de quedarse en casa. Esto es para los débiles", señaló Bolsonaro, recordando que la pandemia es una realidad que hay que enfrentar sin acobardarse.

Al igual que en eventos públicos anteriores, el presidente ultraderechista, así como varios de sus ministros y seguidores, ignoraron las recomendaciones sanitarias al no hacer uso de cubrebocas.

Bolsonaro también se refirió a las críticas internacionales que ha recibido sobre los incendios en la Amazonía y El Pantanal, el humedal más grande del planeta, que abarca parte de los estados de Mato Grosso y Mato Grosso do Sul.

"Otros países que nos critican no tienen problemas con la quema porque ya lo han quemado todo", aseguró.