El juez Raphael Baddini de Queiroz Campos, del Tribunal de Rio de Janeiro en Brasil determinó este jueves a través de un comunicado, el cierre de todas las actividades comerciales y turísticas en la ciudad balnearia de Buzios ante el aumento de contagios por coronavirus. 

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Según plantea la información, el órgano de justicia brasileño dio plazo de 72 horas para que todos los turistas abandonen la ciudad, a la que pide retornar a la llamada bandera roja, es decir, a un cierre casi total de actividades no esenciales.

El magistrado precisó además que los restaurantes podrán actuar apenas con entrega de comida a domicilio, pero no podrán funcionar los hoteles. Sumando a ello, fue prohibido permanecer en las playas ni en espacios públicos, a la vez que estarán prohibidas las fiestas, bailes, espectáculos, ferias o similares.

En tanto, la Alcaldía de Búzios señaló que la medida “lleva al municipio a retroceder inmediatamente con sus flexibilizaciones” en relación con el funcionamiento y la apertura de la ciudad, ya que la justicia promueve el cierre de playas, centros deportivos, establecimientos comerciales y hoteles, posadas y otros medios de alojamiento.

Las mencionadas medidas sanitarias provocaron protestas por parte de los empresarios del sector del turismo. Según los datos diarios de la Organización Mundial de la Salud, Brasil continúa como uno de los tres países más afectados por el coronavirus en el mundo, superando los 7 millones de casos confirmados y 184.000 fallecidos.