Nueve migrantes recibieron este lunes la autorización para ser trasladados a Italia desde el barco de rescate de la ONG española, Open Arms, que se encuentra fondeado a 700 metros de la isla de Lampedusa con 107 personas rescatadas en el Mediterráneo.

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Situación de Open Arms sin miras de solución

Con la evacuación de los nueve migrantes, la ermbarcación aún cuenta con 98 ciudadanos a bordo, que siguen a la espera de ser recibidos por un país europeo; Open Arms, insiste en el rescate del resto de los tripulantes por las condiciones sanitarias en que se encuentran.

"Autorizada evacuación de ocho personas necesitadas de asistencia urgente y de un acompañante (...) Quien no quiera ver la situación insostenible a bordo es que es incapaz sentir empatía por el dolor ajeno", indica la ONG en un comunicado.

Asimismo, los encargados de la embarcación reitera que los países europeos que deberían encargarse del rescate son Italia y Malta, quienes mantienen una política interna con cero tolerancia hacia los migrantes de Lampedusa.

Aunque un tribunal administrativo italiano permitió la entrada de la embarcación en aguas nacionales, el ejecutivo mantiene el veto al desembarco de los migrantes.

Las personas fueron auxiliadas por Open Arms en tres operaciones de salvamento, la primera a pocas millas náuticas de Libia el pasado primero de agosto y las dos restantes en zona maltesa el dos y diez de agosto.