El Salvador ha registrado varios episodios de violencia esta semana que han dejado al menos 30 muertos. Estos hechos están estrechamente relacionados con las pandillas que existen en ese país. 

Este miércoles, como consecuencia de un enfrentamiento entre pandilleros y miembros de vigilancia privada por una pugna de renta y extorsión a comerciantes, seis personas resultaron muertas en el centro histórico de la capital salvadoreña.

En otro hecho relacionado con pandillas salvadoreñas cuatro mujeres fueron asesinadas, entre ellas una embarazada y sus agresores ultimados por la policía local cuando trataban de huir del lugar.  

Por su parte, la Fiscalía General de la República reportó este jueves otros 12 muertos en diferentes puntos del país.

Durante una rueda de prensa, el director de la Policía Nacional Civil, comisionado Howard Cotto, indicó que según su balance "de los 30 homicidios sucedidos el día de ayer, 17 son miembros de pandillas, con la posibilidad que más de ellos sean miembros de estas estructuras criminales".

El experto en temas de seguridad Ricardo Sosa confirmó que este miércoles se registraron de manera oficial "30 homicidios, más cuatro osamentas encontradas en la zona de Ilopango" en la periferia este de la capital salvadoreña y que se se presume pertenecerían a cuatro soldados desaparecidos en octubre de 2016.

"El día de ayer no fue normal", destacó el ministro de Justicia y Seguridad Pública, comisionado Mauricio Ramírez Landaverde, durante una entrevista de radio local. "La situación es complicada y difícil, el problema es fuerte y duro. Nadie dijo que el problema estaba resuelto", añadió el funcionario.

Estos episodios de violencia se registraron luego de que las autoridades de seguridad pública resaltaron una considerable disminución en la cifra de muertes violentas en los primeros dos meses del año.

Cotto negó versiones que aseguran que lo ocurrido pudiera ser el inicio de una nueva escalada de violencia de las pandillas. "No tenemos información de inteligencia que nos lleve a considerar que eso sea así".

El Salvador cerró 2016 con 5.278 personas asesinadas, un promedio de 14,4 muertes violentas por día, y 1.378 homicidios menos en comparación con el año anterior.