El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, condenó este miércoles la ruptura del orden democrático en Zimbabue, donde los militares tomaron el control del país y su homólogo Robert Mugabe afirma estar bajo arresto domiciliario.

A través de un comunicado publicado por la Cancillería, el Gobierno venezolano llamó a la inmediata restauración de la institucionalidad democrática y al pleno respeto a la Constitución, las leyes y la democracia en el país africano.

La Unión Nacional Africana de Zimbabue-Frente Patriótico (ZANU-PF) anunció este miércoles que el mandatario y su familia están detenidos y que el nuevo presidente interino es el ex vicepresidente Emmerson Mnangagwa, de acuerdo con información reseñada en medios internacionales.

Además de Venezuela, China abogó este miércoles por el mantenimiento de la paz en Zimbabue, luego que un sector del Ejército tomaron el control de Harare, la capital, y retuvieron al presidente Robert Mugabe.

"China y Zimbabwe tienen una relación de amistad, y mantener la paz y la estabilidad en ese territorio es un interés fundamental, y es lo que la comunidad internacional espera", dijo Geng Shuang, vocero del ministerio de Relaciones Exteriores de China.

Estados Unidos (EE.UU.) expresó su preocupación por la intervención militar en el proceso político de Zimbabue y confió en que se logre una resolución rápida de la crisis política dentro del marco constitucional, pero no llegó a calificar lo ocurrido como un golpe de Estado.

Mientras que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) llamó a los países a rechazar la violencia generada en Zimbabue y a enfocarse en la resolución pacífica de la situación, aseguró este miércoles el portavoz adjunto, Farhan Haq.