El presidente sudanés, Omar al Bashir, aprobó este jueves un decreto que extiende la prolongación de tres meses más al cese al fuego tras los actos violentos que actualmente se presentan en algunas zonas ubicadas al sur del país.

La prolongación del decreto se debe a que el pasado se venció el 31 de diciembre y tenía como objetivo generar un clima de negociación para aquellas regiones afectadas con el fin de restablecer la paz y la estabilidad.

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Las regiones afectadas son Kordofán del Sur, Nilo Azul y Darfur, tras los enfrentamientos de los rebeldes y el Ejército nacional de Sudán

Según datos de la Organización para las Naciones Unidas (ONU), Darfur ha sido la región más afectada ya que estos enfrentamientos han causado la muerte de más de 300.000 personas y 2,7 millones de individuos se han visto obligados a abandonar sus comunidades.

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El pasado martes la alta representante en el área de Política Exterior de la Unión Europea (UE), Federica Mogherini, se pronunció y solicitó al Gobierno y a la oposición de Sudán del Sur que paren el fuego ya que "todas las partes deberían respetar su compromiso con el cese de hostilidades y parar todas las formas de lucha".

El pasado 24 de diciembre el Gobierno de Sudán y las principales facciones rebeldes del sur sostuvieron un acuerdo que establecía el cese al fuego, sin embargo, cuatro días después el vicepresidente de la nación James Wani Igga, anunció que en algunas partes del país continuaba la violencia.