El expresidente ecuatoriano Rafael Correa expresó este lunes su preocupación ante la situación que actualmente presenta Venezuela y señaló que existe un sesgo en el análisis de la situación, así como un "constante asedio" por parte de las "fuerzas nacionales, su oligarquía, sus medios de comunicación y de fuerzas internacionales como Estados Unidos".

"Venezuela por supuesto nos preocupa, pero siempre nos mantendremos en el principio de que eso lo tendrán que resolver los venezolanos en democracia y en paz", agregó Correa.

Asimismo, el exmandatario declaró que "la agresión contra Venezuela no empezó con Donald Trump, tal vez se ha incrementado con él, Obama la mantuvo cuando lanzó el decreto que declara a esta nación como una amenaza a su seguridad, una inconsecuencia terrible", señaló Correa durante una entrevista.

De esta manera, el exmandatario refirió que la solución a los problemas del país está en manos de sus ciudadanos.

"Recuerden que hemos pasado momentos económicos muy duros que, sin lugar a dudas, la política depende en gran medida de la situación económica. Yo creo que cuando mejore la situación económica, la situación de tensión va ir bajando y se va a ir consolidando el Gobierno de Nicolás Maduro. Mientras tanto, ojalá, no se caiga en más brotes de violencia ni más muertes", señaló Correa.

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Cuando fue consultado sobre el papel de la Organización de Estados Americanos (OEA) con respecto al tema de Venezuela, Correa aseguró que "el rol de la OEA ha sido muy triste, y también inconsistente y de doble estándar", y refirió al silencio de la organización durante el golpe de Estado en Honduras y contra la presidenta brasileña Dilma Rousseff.

"Nuestra divergencias y conflictos deben tratarse en la región por medio de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), pero eso de viajar a Washington para solucionar nuestros problemas es una aberración. La OEA debe servir para procesar nuestras diferencias con América del Norte", indicó Correa.