El presidente de Rusia, Vladimir Putin, recibirá este jueves al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, con quien intercambiará puntos de vista sobre asuntos clave en el Oriente Medio, y abordará la cooperación bilateral.

La reunión entre los jefes de Estado está prevista para pasado el mediodía, hora local, y se prevé que discutan sobre los temas de actualidad de la cooperación bilateral en las áreas prioritarias. También hablarán sobre el proceso de paz palestino-israelí y la situación en Siria, según detalló el Kremlin.

Esta sería la séptima visita oficial que hace Netanyahu a Moscú desde que fue nombrado primer ministro de su país, en marzo de 2009. Este nuevo viaje no ha caído en gracia para Estados Unidos, según informó el diario alemán Deutsche Wirtschafts Nachrichten, puesto que según Washington las intenciones de Netanyahu son buscar el apoyo de Moscú en la disputa del territorio de los Altos del Golán con Siria.

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El Departamento de Estado norteamericano expresó que, contrario a lo que asegura Netanyahu, tal territorio no pertenece a Israel y que las reclamaciones territoriales deben ser aclaradas en un proceso de negociación, el cual es imposible debido a la situación de violencia en Siria, y "EE.UU. no cambiará su postura", reseñó Haaretz.

Este enfoque de EE.UU., el principal aliado del régimen de Israel, fue anunciado después de que Alemania, Irán, Siria y la Liga Árabe (LA) reaccionaran ante las alegaciones de Netanyahu, considerándolas como una violación de los derechos internacionales y de la Carta de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

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En contexto

Actualmente, las relaciones comerciales entre Rusia e Israel son una baza importante para ambos Estados. Según datos del servicio aduanero de Rusia, la estimación del comercio exterior entre las naciones estuvo en más de mil 537 millones de dólares en exportaciones, y en 806 millones de dólares en importaciones.

Rusia suministra a Jerusalen combustible, materias primas, diamantes en bruto y sistemas de producción agroindustriales. Mientras que Israel exporta a Moscú productos alimenticios como frutas y verduras, productos industriales de alta tecnología, farmacéutico e ingeniería mecánica.