Tras el envío de una propuesta que contempla una reforma del sistema de pensiones y del Impuesto al Valor Agregado (IVA) por parte del presidente de Grecia, Alexis Tsipras, hay que tener "cuidado" para no generar descontento en la población de la nación helena.

"Empiezan a estar satisfechos por las cesiones de Tsipras... hay que tener cuidado porque a lo interno esto puede causar estrés en la población, pueden causar descontento con la gente", aseguró el analista internacional, Fernando Casado, en una entrevista a teleSUR.

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Enfatizó además que para evitar este escenario, debe existir una diferencia entre las propuestas del mandatario griego frente a las realizados por el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Central Europea (BCE) y la Comisión Europea (CE).

"Un paquete de austeridad aceptado por Tsipra que no difiera de lo que quiere imponer al pueblo griego la Unión Europea, la troika, da como resultado un mayor descontento".

En este sentido, el especialista señaló luego de la posición que adoptó la UE al pretender "forzar a Grecia a la aprobación de un plan más duro que en gobiernos anteriores", hay que considerar que pudiera tratarse de intento para que no hubiera éxito en un partido de izquierda que no tiene cabida en el órgano europeo.

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Asimismo, precisó que en ese continente "cuando fracasan las alternativas de izquierda surgen con mayor fuerza las opciones fascistas de derecha. Casado aseguró que pese a esta condición, el referendo ha tenido como resultado el fortalecimiento del Gobierno de Tsipra y "ha sido un llamado de atención también a Europa".

En cuanto a la posibilidad de que los BRICS pudieran financiar la deuda griega, el analista afirmó es una forma de decir "basta a la troika, que más allá de lo económico busca cerrarle las alternativas a la izquierda".

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