El presidente de Ruanda, Paul Kagame, dijo en una entrevista que será publicada el domingo en un semanario, que Francia participó en la ejecución del genocidio de 1994.

La denuncia fue hecha a través de la revista Jeune Afrique, en la que Kagame fustigó el rol directo de Bélgica y Francia en la preparación política del genocidio y la participación de esta última en su ejecución.

De acuerdo a lo aseverado por el mandatario ruandés los soldados franceses de la operación militar humanitaria Turquesa, desplegados en junio de 1994 en el sur del país, fueron no sólo "cómplices" sino también "actores" de las masacres.

Por otro lado, Kagame constató que 20 años después, el único reproche admisible para (Francia) es el de no haber hecho lo suficiente para salvar vidas durante el genocidio.

“Esto esconde lo más importante: el rol directo de Bélgica y de Francia en la preparación política del genocidio y la participación de esta última en su ejecución", apuntó.

Ante esta reacción, Francia replicó suspendiendo su participación en las conmemoraciones de la tragedia.

"Francia está sorprendida por las recientes acusaciones formuladas en su contra por el presidente de Ruanda", las cuales "están en contradicción con el proceso de diálogo y de reconciliación iniciado hace varios años entre nuestros dos países", dijo el portavoz del ministerio francés de Exteriores, Romain Nadal.

Al respecto, aseguró que en estas condiciones, la ministra de Justicia, Christiane Taubira, no viajará el lunes a Kigali (capital).

En agosto de 2008, el Gobierno de Kigali formuló esta denuncia ante la comisión de investigación ruandesa sobre el supuesto rol de Francia en el genocidio que causó la muerte de unas 800 mil personas, según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), principalmente de la etnia tutsi, entre abril y julio de 1994.