El presidente de EE.UU., Barack Obama, confía en la "integridad" y profesionalismo del director del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por su sigla en inglés), James Comney, quien inició un proceso judicial contra la demócrata Hillary Clinton el pasado viernes.

El portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, advirtió que el Gobierno no va a criticar ni a defender la decisión de Comney sobre investigar nuevos documentos relacionados con el uso de un servidor de correo privado utilizado por Clinton cuando fungía como Secretaria de Estado.

Igualmente el portavoz aseguró que el presidente Obama mantiene su opinión positiva sobre el "carácter" de Comney y agregó que "no cree que esté tratando de influir en el resultado de la elección" del próximo 8 de noviembre y tampoco considera que el director arme una estrategia secreta para beneficiar a un candidato o partido político. 

Earnest afirmó desconocer los motivos que llevaron al director del FBI a informar sobre las nuevas revelaciones en el caso de los correos de Clinton con las elecciones estadounidenses tan cerca. 

Algunos ex altos oficiales del Departamento de Justicia criticaron la decisión "sin precedentes" de Comney de adelantar datos sobre una investigación en proceso ligada a un candidato teniendo tan cerca un proceso electoral.