El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, rechazó este martes las declaraciones injerencistas del mandatario estadounidense Barack Obama y su obsesión por acabar con la Revolución Bolivariana.

Desde el Cuartel de la Montaña donde se honra la memoria histórica del Comandante Hugo Chávez, el mandatario suramericano acusó a Obama de apoyar las acciones golpistas de la derecha venezolana.

Indicó que Barack Bbama declaró a la cadena estadounidense CNN cosas graves contra Venezuela, en las que fomenta su salida inconstitucional.

Nicolás Maduro como “presidente de todos los venezolanos, de una República jamás ha enviado sus tropas a gobernar” otra nación, contrario a las acciones de la Casa Blanca que de manera “innoble y obsesiva me ataca”, reflexionó.

Ante la afirmación del mandatario estadounidense sobre la "necesidad" de que el pueblo venezolano cambie de Gobierno lo más pronto posible, Maduro recordó que “George W. Bush conspiró activamente contra Chávez” pero nunca pidió una salida directa del jefe de Estado.

Determinó que la desesperación por sacarlo del Palacio de Miraflores es el reconocimiento del desprecio y arrogancia de Obama, sin embargo, “en cualquier circunstancia el amor a la patria vencerá”.

>> Maduro: La obsesión de Obama es acabar con la Revolución Bolivariana

A través de un comunicado, la cancillería venezolano repudió "las injerencistas y arrogantes declaraciones del Presidente de los Estados Unidos de Norteamérica Barack Hussein Obama, que desconoce al gobierno legítimo y constitucional de Venezuela".

El texto señala que desconocer al gobierno electo por el pueblo de Venezuela "infringe normas y principios elementales del Derecho Internacional y de la Carta de las Naciones Unidas, como el principio de no injerencia en los asuntos internos, el principio de autodeterminación de los pueblos y de igualdad soberana de los Estados".