Durante su primer discurso en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el presidente de México, Enrique Peña Nieto, mencionó en varias ocasiones el “Pacto por México” como un ejemplo de colaboración y pluralismo en su país, olvidando mencionar que en él se agruparon solo los tres partidos mayoritarios mientras a los actores menores políticos de la nación fueron excluidos a la hora de concertar las votaciones legislativas con respecto a los proyectos de reformas del gobierno priista.

El aparato político mencionado por Peña es responsable por la aprobación de las reformas constitucionales que el Presidente exhibe como los logros de su país, un ejemplo de ello es la Reforma Educativa  que ha ocasionado movimientos magisteriales a lo largo y ancho de la nación.

También al Pacto por México se debe la aprobación en “fast track” de la Reforma Hacendaria, considerada por expertos como una modificación fiscal que afecta más a los sectores trabajadores y beneficia a los empresarios; y la Reforma Energética, que pone los hidrocarburos del país a disposición de las compañías transnacionales y da luz verde al controvertido proceso extractivo conocido como “fracturación  hidráulica” o fracking.

A partir de su experiencia reformista, Peña declaró que es momento de que la ONU aproveche la experiencia mexicana y se disponga a cambiarse a si misma.

“A casi 70 años de su fundación, la ONU debe evolucionar, México está dispuesto a formar parte activa (…) es tiempo de construir una nueva ONU para un nuevo siglo”, declaró el mandatario.

“Los mexicanos decidimos transformarnos, la diferencia con el pasado fue la voluntad, México se atrevió a  cambiar, se atrevió a transformarse y ponerse en movimiento...Estoy convencido de que la ONU también quiere cambiar”.

"Estoy convencido de que la ONU también quiere cambiar"

Peña anunció que su país está listo para una participación más amplia en las Operaciones de Mantenimiento de la Paz, para ayudar a la ONU en su labor de “ayudar al mundo a superar conflictos y alcanzar la paz duradera”.

Sin embargo, según reportes de la  prensa mexicana, a 20 meses de haber iniciado su mandato, en México han muerto 19 mil mexicanos en hechos relacionados con el crimen organizado y la guerra contra el narcotráfico.

Enrique Peña Nieto también olvidó mencionar que sobre la elección que lo llevó a la casa presidencial pesan graves acusaciones de fraude sistémico y que en su país se tiene registro de 1,885 recomendación de la Comisión Internacional de Derechos Humanos del 1994 a 2013,  por violaciones a los DDHH que van desde Desaparición Forzada hasta Trata de Personas.

También durante su intervención en la ONU, Enrique Peña Nieto urgió al organismo internacional a la creación de una acción conjunta a nivel mundial, para combatir el acoso escolar o bullying.