Mientras el presidente de Argentina, Mauricio Macri, disfruta de sus últimos días de vacaciones en la localidad neuquina de Villa La Angostura (sur) junto a su esposa e hija, más de un millón de hectáreas fueron arrasadas por los incendios forestales que afectan varias provincias del país.

Macri tiene previsto regresar a la capital argentina el próximo domingo para realizar algunas "reuniones de seguimiento" de gestión que se llevarán adelante el lunes.

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El primer mandatario se tomó esos días de descanso aún cuando el país atraviesa una serie de conflictos, tales como la salida de Alfonso Prat-Gay, la toma del Ministerio de Educación por 3.000 despidos y los extensos incendios en la Provincia, La Pampa y Río Negro.

Pero Macri no es el único que gozó de vacaciones. También el ministro de Ambiente argentino, Sergio Bergman, estuvo de asueto mientras un incendio hacía arder parte del país.

"No vengo a actuar. Vine a dar aliento a los brigadistas que combaten los incendios", expresó el funcionario al regresar de su descanso y, además, añadió que era necesario "aceptar el cambio climático".

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Sus palabras llegan después que, durante sus vacaciones, más 1 millón 400 mil hectáreas fueran consumidas por el incendio forestal.