El primer ministro francés, Manuel Valls, reafirmó este jueves que no retirará la reforma laboral, aunque asomó  la posibilidad de introducir algún cambio pero "sin modificar la filosofía general del texto"

Durante una entrevista televisada por RMC u BFM TV, manifestó nuevamente su posición de seguir desbloqueando las instalaciones petroleras e industriales que han sido cerradas por grupos de trabajadores en protesta contra la ley.

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De igual forma, afirmó que la reforma se acabará aprobando este verano y no descartó volver a recurrir a mecanismos para evitar evitar el voto en la Asamblea Nacional, donde no tenía mayoría.

Con relación a la acción de la Confederación General el Trabajo (CGT), organización que lidera las acciones de calle contra la reforma laboral, indicó que el gobierno podría recurrir a las disposiciones que permiten obligar a volver al trabajo a los huelguistas en caso de fuerza mayor. 

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Valls puntualizó que en cualquier caso no cambiarían la esencia del artículo 2, el más polémico, y al que se opone tajantemente la CGT, que establece la primacía de la negociación dentro de la empresa, en detrimento de los convenios colectivos.

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