Un estudio realizado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en conjunto con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) advierte que dos mil 400 millones de personas carecen de agua.

De igual forma señala que la falta de progreso en materia de saneamiento, limpieza y purificación amenaza principalmente a la salud de la población infantil, debido al consumo del vital líquido en condiciones dudosas.

El estudio hace seguimiento al tema para verificar el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), y especifica que una de cada tres personas, no cuenta con infraestructura de saneamiento.

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Tarea pendiente

Aunque el 91 por ciento de la población mundial tiene acceso a fuentes de agua aptas para el consumo humano, los avances en materia de saneamiento no son proporcionales.

El documento de la OMS y Unicef señala que las campañas de educación sobre el consumo y uso de agua no han sido efectivas.

Según el reporte de los expertos al menos el 69 por ciento de los ciudadanos cuentan con instalaciones de saneamiento para aguas, muy por debajo del 77 por ciento establecidos en los ODM.

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A su vez el informe destaca que América Latina se encuentra por encima de la media mundial, en contrasta con los índices registrados en Asia y África Subsahariana.

Recomendaciones

Las sugerencias de estos organismos pasan por fortalecer los servicios de abastecimiento y saneamiento en zonas de difícil acceso, pobres y rurales, además de tecnología innovadora de bajo costo a disposición de los sectores más desfavorecidos, al igual que mejorar la higiene en hogares, escuelas, y centros de salud.

Señala la necesidad de abordar las inequidades para lograr progresos sustentables, y condena que el modelo priorice el bienestar de los más ricos sobre el de la población pobre.

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