El Gobierno de Eslovenia suspendió el jueves el tránsito ferroviario en una zona fronteriza con Croacia, después de que un tren con 150 refugiados a bordo fue interceptado en la estación de Dobova. 

La policía informó que las personas detenidas en la parada de tren serán devueltos a Croacia, pues este es el mayor grupo de refugiados detenidos que trata de entrar en el país desde que agudizó la crisis en Europa. 

“La UE evita decir la verdad sobre los refugiados”
 

"Los devolveremos a Croacia en el menor tiempo posible", dijo el jefe de la sección fronteriza de la Policía de Novo Mesto, Anton Stubljar, a la agencia Reuters.

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Los solicitantes de asilo provenientes de Siria, Irak, Afganistán y África intentaban pasar por Eslovenia para seguir su largo camino hacia Alemania, pero  las autoridades  les ordenaron no salir de los vagones y ellos comenzaron a gritar "¡UN, UN!" (ONU en inglés), golpeando con las manos. 

Ante este hecho, el Ejecutivo manifestó que reforzará los controles fronterizos con Hungría y mensaje a la Comisión Europa que su frontera permanecerá cerrada durante al menos 10 días.