El papa Francisco criticó este viernes el dopaje en el deporte y animó a los atletas a no jugar sucio y a no caer en este tipo de prácticas que sólo traen “victorias feas y estériles”.

“El vuestro es un tipo de deporte muy competitivo pero la presión de querer conseguir resultados significativos no debe nunca empujarlos a tomar atajos como el caso del dopaje”, señaló el sumo pontífice en una audiencia con los miembros de la Federación italiana de Tenis, en el Vaticano.

“¡Qué fea y estéril es aquella victoria que se obtiene con juegos sucios, violando las normas y engañando a los otros!”, enfatizó el Papa.

Para el pontífice la misión de los deportistas tiene que “ser, para todos los que os admiran, válidos modelos a imitar”.

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Respecto al trabajo de los dirigentes y entrenadores deportivos, destacó que ellos están llamados “a dar un buen testimonio de los valores humanos” porque son “maestros de una práctica deportiva que siempre sea leal y limpia”.

Francisco dijo que el deporte es uno de los tres pilares fundamentales para niños, muchachos y jóvenes, sumado a la educación y el trabajo.

“Cuando convergen los tres se dan las condiciones para desarrollar una vida plena y auténtica, evitando así las dependencias que envenenan y arruinan la existencia”, explicó.

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